Sesión 08

COMO UN HOMBRE PIENSA, ASÍ ES SU VIDA

(As a Man Thinketh)

 

Iniciamos ahora el 2° capítulo del libro, y aquí James Allen retoma la analogía del jardín para hablar de nuestra mente y pensamientos. Veremos cómo, sea que hagamos o dejemos de hacer, es decir plantemos nosotros lo que pensemos o dejemos que la mente divague sin sentido, esas semillas o pensamientos darán los resultados correspondientes…

 

  1. Efecto del pensamiento en las circunstancias

La mente de un hombre se compara a un jardín, que puede ser inteligentemente cultivado o ser abandonado y llenarse de hierbas; pero sea cultivado o descuidado, está destinado a producir. Si no se siembran semillas útiles, entonces semillas de hierba mala caerán, crecerán en abundancia y se reproducirán.

Al igual que un jardinero cultiva su parcela, manteniéndola libre de mala hierba, cultivando las flores y frutos que requiere, así debe también el hombre atender el jardín de su mente limpiándola de pensamientos dañinos, inútiles e impuros, y cultivando hasta la perfección las flores y frutos de pensamientos correctos, útiles y puros. Sólo siguiendo este proceso el hombre tarde o temprano descubre que él es el jardinero maestro de su espíritu, director de su vida. También descubre en sí mismo, las leyes del pensamiento, y entiende, cada vez con mayor precisión, cómo la fuerza del pensamiento y los elementos de la mente operan en la formación de su carácter, sus circunstancias y su destino.

 

COMENTARIOS:

La comparación de la mente con un jardín es afortunada porque explica claramente cómo funciona nuestra mente, pues si nosotros no decidimos o elegimos los pensamientos, la misma mente lo hará por nosotros y lo hará de acuerdo a la manera en que ya estábamos programados o simplemente producirá “hierba” o sea algo que no sirve, peor aún cizaña que ensucia y que probablemente hasta haga daño. La afirmación es una alerta importante pues nos advierte que si nosotros no tomamos acciones y el control de nuestros pensamientos, la mente igual seguirá produciendo y lo que resulte no será necesariamente lo mejor para nosotros.

La comparación también nos habla del jardinero o sea cada uno de nosotros, y quienes a fin de cuentas somos los responsables de lo que se planta o sucede en nuestro jardín mental y nos invita a elegir el tipo de semilla o pensamiento que debemos sembrar y que puede ser lo que cosechemos de acuerdo a lo que sembramos.

 

ACCIONES:

  • Hoy la tarea la pone el mismo autor cuando nos dice que evitar…

…pensamientos dañinos, inútiles e impuros…

  • Y también nos dice que hacer…

…y cultivando hasta la perfección las flores y frutos de pensamientos correctos, útiles y puros.